Suspiros de amor: Y por fin se paró el tiempo…
Y por fin se paró el tiempo… Y en ese instante, en ese preciso instante, nada importaba… Las cien canas nuevas (contadas), el pellizco en el estómago, las preocupaciones, la aceleración y la ansieté de una semana de las que quitan años de vida (a mí a este paso me quedan muy pocos) se esfumaban.
La NSN durmiéndose en mi pecho, la música clásica suave, de fondo, como cada noche (a rutina estricta no nos gana nadie) y, de repente, el latir del corazón suave, la respiración pausada y una paz interior me devolvía a la vida, a sentir lo que realmente importa, a querer que se detenga el tiempo, a importarme un bledo eso que dicen de que los niños tienen que dormir solos. La preocupación por los proyectos que cerrar, por la nevera vacía, por la boda, por la juerga nocturna del PNSN daban igual.
Y entonces la felicidad, el nudo en la garganta, la emoción de tenerla cerca de mí sin la prisa diaria de la cena, los posts, las láminas, la lavadora… Esa es la felicidad y una de las sensaciones más maravillosas que me ha aportado ser madre: la tranquilidad de que todo irá bien, pase lo que pase; la tranquilidad de disfrutar los momentos, los minutos, los segundos; la tranquilidad de relativizar las cosas, por graves que parezcan, y un profundo amor indescriptible.
Shhhhh… Hablad flojito, muy flojito, que por fin se ha dormido…
Juro que hoy quería escribir del cansancio infinito, de las ganas de no hacer nada, de la necesidad de tirarme en el sofá a ver a mi amor virtual en escena (Don Draper), pero la realidad siempre supera los pensamientos previos. Y en Truman la actualidad manda.
Antes de irme a la cama, sólo una cosa: si no tenéis planes mañana pasaros a vernos a mí, a la NSN y a todos los que forman Lanoa, con Diana a la cabeza, que estamos de cumpleaños. ¿Dónde? En Topbooks de Fuencarral. Y os regalo una postal especial para las mamis, como estas.
* ¿Cuál queréis?
* Un rinconcito con algunas #biutifulzin en Topbooks Fuencarral #Lanoaparty.
* Las postalitas ya os esperan… ¿No queréis una?
¡Os espero mañana!
La niña sin nombre.
11 responses to “Suspiros de amor: Y por fin se paró el tiempo…”
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La niña sin nombre 
Qué bonita entrada! Me han dado ganas de ir y abrazar a mi peque… Mucha suerte mañana, si estuviera más cerca seguro me pasaría a conoceros. Besos
Ay! Como te entiendo. Yo tambien siento que se para el tiempo y las preocupaciones vuelan cuando estoy con mi principe azul.
No te digo ná pero a ver si mañana nos vemos, tu por si acaso guardame una postal tan #biutifulzin de las que haces con mucho love ♥♥♥
Besotes!
Ayyy que pena que me voy a quedar sin una de esas postales preciosas! No voy a poder ir esta tarde, pero espero que lo paseis genial!
Por cierto, lo se, despues de una semana horrible de curro donde parece que nada lo puede arreglar, llega tu pequeña y hace que te olvides de todo! Es mágico… Lo mejor!
Qué bonito, princesa!!, y cuánta razón tienes, esos momentos no tienen precio, no quieres que acaben nunca, quedan grabados en nuestra piel, y compensan todo aquello que nos cansa, nos preocupa y nos deja sin aliento.
Y a medida que crecen , son aún más valiosos. Tenedor se durmió así hace unas semanas, y no veía el momento de llevarlo a la cama, hacía ya muchos meses que no pasaba…es lo que tienen que crezca, y sean más independientes.
Esas láminas, serán un éxito!!!
Besos mil.
A veces esos momentos tan valiosos los obviamos nosotras mismas por las prisas, por las preocupaciones… Afortunadamente a veces, paramos y nos dejamos querer y dejamos que hable el corazón. Si no fuera por esos ratitos.
Mucha suerte en el aniversario de Lanoa.
Besos.
Despotricamos, somos #malasmadres, nos queremos ir de farra, queremos que nos dejen unas horas solas… pero en cuanto los tenemos dormiditos en nuestros brazos, agarrados a nosotras como si no hubiera nada más en el mundo se nos olvida todo. Y hasta haríamos blogs de esos en los que no se dice nada malo de la maternidad y todo es de color rosa. ¡jodíos niños!
Qué bonito…
Que rabia me da vivir a 400 kilómetros!! Me hubiera encantado ir a esa fiesta!! Ganas de conocer a tanta gente creativa!! A mi también me encanta que la peque se me quede durmiendo encima, aunque ahora es poco habitual, pero ayer mismo me sentí asi como dices…Si es que los hijos nos hacen sentir cosas increibles!! Besos!!
qué maravilla de momento, no me extraña que te haga olvidar todo!! al final siempre nos recuerdan qué es lo importante, no?
¡Qué bonito tu post! Que ganas me han entrado de poder disfrutar yo tb de estos momentos… Me alegro un montón que estés al 100% concentrada en tu amor y en vivir el presente. Seguro eso te devuelve todos los años perdidos con el estrés
Un beso grande pero silencioso para no despertar a nadie,
Ayer mismo, al sacar a mi peque del baño y según le abrazaba y le frotaba para secarle, mientras le susurraba «tiene frío mi príncipe?, no te preocupes que mamá te da calorcito» se quedó el pobre dormidito y daba un gustito darle besitos en los mofletillos tan blanditos y calentitos que me habría pasado horas con él así, y es cierto, es una sensación de amor infinito difícil de describir, que compensa todo lo demás…
Enhorabuena por tu blog y gracias por emocionarnos con entradas como esta…